Poco a poco se van consiguiendo nuevos avances para luchar contra el Alzheimer, a continuación les hablamos de los nuevos fármacos.
Aduhelm, el pionero fármaco autorizado para abordar el Alzheimer en los últimos 18 años, ha sido objeto de muchas controversia. Desarrollado por la empresa de biotecnología Biogen, este fármaco, también conocido como aducanumab, elimina la forma tóxica de una proteína llamada amiloide beta, que se acumula en el cerebro de los pacientes con Alzheimer y puede afectar la comunicación entre las células cerebrales.
Siempre estas noticias hay que tomarlas con cautela, pero al contrario que otros medicamentos este podría frenar el avance de la enfermedad en vez de tratar los síntomas. Sin embargo, hay muchos expertos que consideran que en lo ensayos clínicos apenas hubo beneficios y que podría tener efectos secundarios graves a la larga.
No hay unanimidad sobre si la proteína amiloide es la causa del Alzheimer, por ese motivo eliminar esa proteína podría tener graves efectos secundarios.
Hay otros fármacos experimentales en desarrollo para tratar el Alzheimer como el Donanemab que ralentiza el deterioro cognitivo en las primera etapas en un 35% .
Este tratamientos actúan sobre las placas cerebrales generadas por una proteína denominada amiloide, modificando la función celular y desencadenando la rápida difusión de otra proteína conocida como tau. Ambas, tanto la amiloide como la tau, participan en el progreso de la enfermedad de Alzheimer.
Leqembi (lecanemab-irmb) es un anticuerpo monoclonal empleado en el manejo de la enfermedad de Alzheimer. Se suministra en los inicios de la enfermedad cuando hay unb Deterioro cognitivo leve o demencia leve.
Opera al reducir las acumulaciones de beta-amiloide en el cerebro, frenando así la marcha de la enfermedad de Alzheimer. No obstante, no constituye una cura para la enfermedad, solamente una mejora en el tratamiento.
Para su administración, requiere ser inyectado mediante el procedimiento de infusión intravenosa en intervalos de dos semanas. Este enfoque de administración se ha diseñado para garantizar una distribución constante del medicamento en el organismo a lo largo del tiempo, optimizando así su efectividad en el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer. El régimen de dosificación quincenal ha sido establecido con el objetivo de mantener niveles terapéuticos adecuados y brindar un abordaje continuo en la gestión de la enfermedad.
La investigación en esta área sigue siendo activa, y los científicos esperan encontrar tratamientos más efectivos para esta enfermedad devastadora.